Esta exposición ha querido sumarse a la celebración de los 200 años del Museo Nacional del Prado, una de las grandes pinacotecas no solo a nivel nacional sino también internacional. Y es que, en cierta manera, la Universidad de Granada ha estado unida desde hace muchos años al Museo del Prado pues se constata que desde 1881 ya hay depósitos en la universidad del entonces llamado Museo Nacional de Pintura y Escultura.
La muestra se estructura en varias secciones dedicadas a las obras originales procedentes del Museo Nacional del Prado con una gran variedad de temas, puesto que hay escenas religiosas, representaciones de reyes, de paisajes y de pasajes históricos, y en un arco cronológico extenso que abarca desde el siglo XVII hasta el siglo XX, una sección titulada el Prado en femenino que destaca a las mujeres en una historia que tradicionalmente las ha invisibilizado y que presentamos en dos facetas, por un lado imágenes de cómo se las ha representado y por otro obras realizadas por ellas como artistas.
Por último concluimos con un apartado dedicado al sentido de la copia frente a los originales. Tradicionalmente se han minusvalorado las copias, cuando en determinadas épocas fueron realizadas por artistas afamados. Pero además, implica llevar a muchas ciudades, y a espacios muy diversos, esa imagen que había logrado reflejar de forma adecuada un momento, un personaje, o simplemente que había gustado.